La supresión de los controles al movimiento de personas en las fronteras interiores de los Estados miembros es un fenómeno relativamente reciente que se inicia con la entrada en vigor, en 1995, del Acuerdo de aplicación del Convenio de Schengen sobre la eliminación de los obstáculos a la libre circulación de las personas. Este tratado internacional elaborado por un grupo de Estados miembros e, inicialmente, ajeno a la estructura institucional comunitaria fue el primer paso dirigido a poner en común las cuestiones relativas al control de los flujos migratorios que ha llevado que ha llevado a la gestación de una incipiente política migratoria comunitaria.

Fuente:
Revista d’Estudis Autonòmics i Federals

Año:
2012

Autor:
Andreu Olesti Rayo, Catedrático de Derecho Internacional Público de la Universidad de Barcelona

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